Desde el pasado marzo 2020 la situación de contingencia en la que nos ha sumergido el Covid-19 nos ha llevado por un mar de retos, poniendo al límite las finanzas de miles de mexicanos, saturando nuestro debilitado sistema de salud y desafiando ampliamente al rubro de la educación pública en México, tema que hoy nos atañe. Estamos experimentado por primera vez un reto así de grande en la impartición de conocimientos de forma remota; descubramos más a detalle los desafíos que esto implica.
Este año 2021 hemos padecido duramente los efectos de la sequía a lo largo y ancho de la República Mexicana; uno de los puntos de referencia más fiables para la medición de sus efectos son las presas, mismas que vieron disminuidos sus niveles de manera alarmante, siendo así que el temporal que recién inicia ha resultado un remanso de tranquilidad y esperanza para abastecer la demanda del vital líquido.
Las organizaciones, así como los seres humanos, no son entes aislados; existen en un entorno que los afecta y al que deben responder para no desvanecerse, por eso las organizaciones se definen como un sistema abierto (al menos en teoría), que se retroalimenta constantemente tanto del interior como del exterior.
Hoy en día la oferta televisiva se antoja apabullante, habiendo opciones para todos los gustos, edades y criterios; es imposible, incluso, abarcar en el menú su totalidad. Pero hay una serie que está rompiendo records de audiencia y que destaca entre las demás opciones disponibles; hablemos un poco más de este fenómeno de audiencia.
El estruendo de un megáfono, seguido de unos torpes pasos rompen con el silencio en una calle, para posteriormente destruir la paz reinante en la ciudad; lo que era un encuentro entre dos seres humanos (uno vivo, el otro muerto), ahora se convierte en una horda de violencia y muerte.